Cómo cuidar las camisas
Asegúrate de que tu camisa se mantenga en las mejores condiciones durante el mayor tiempo posible con nuestra guía de cuidado de la camisa
Tomarse el tiempo para lavar, mantener y almacenar correctamente las camisas las mantendrá en perfecto estado por más tiempo. Aquí hay algunos consejos esenciales para asegurarte de que tus camisas luzcan siempre impecables.
Prepara tus camisas antes de lavarlas
Lavar las camisas del revés evita la decoloración, la abrasión y eventuales daños a los botones. También es una buena idea tratar previamente los puños y el cuello antes de lavarla, ya que estas áreas son propensas a las manchas. Puedes hacerlo aplicando un poco de detergente directamente en estas áreas.
Lava tus camisas a mano o elige un programa en frío
La mejor manera de lavar las camisas es a mano, que es más suave que un lavado a máquina. La siguiente mejor opción es lavar la camisa eligiendo un ciclo de lavado en frío, como 30ºC. Una temperatura baja reducirá la posibilidad de encogimiento. Al igual que con toda la ropa, lava prendas de tonos similares para evitar la transferencia de color.
Seca tus camisas al aire
Sin alguna duda las secadoras son cómodas, pero pueden ser dañinas para la tela de una camisa, así que trata siempre de secar tus camisas al aire. La mejor forma de hacerlo es colgar las camisas en una percha y dejarlas en un lugar cálido y seco. Colocar un deshumidificador cerca acelerará el proceso de secado. Este método no solo es delicado, sino que también evitará que las prendas se arruguen.
Plancha en el orden correcto
A la hora de planchar una camisa, plancha primero el cuello y los puños y sucesivamente las mangas y el cuerpo. Dejar el torso de la camisa para el final significa que no tendrá la oportunidad de volver a arrugarse. Es preferible planchar la camisa del revés y con algo de vapor.
Cuélgala y dóblala con cuidado
Guardar tus camisas colgadas las mantendrá libres de arrugas y luciendo lo mejor posible. Es importante asegurarse de que la percha no sea más ancha que los hombros de tus camisas.
Si no tienes espacio disponible para colgar tu ropa, te contamos cómo tienes que doblar una camisa: empieza abotonándola y luego colócala en una superficie con los botones hacia abajo. Dobla las mangas por detrás de la espalda. Ahora dobla las mangas hacia arriba para que cada puño toque el cuello. Dobla los lados de la camisa hacia adentro para que se unan en el medio. Dobla la camisa en tercios comenzando desde el dobladillo hacia arriba, luego dale la vuelta para que los botones queden hacia arriba.
Alterna tus camisas
El uso excesivo de una camisa acelerará su deterioro. Debes hacer rotar tus camisas para que todas se desgasten por igual. Si tienes un estilo favorito de camisa, considera comprar varias del mismo estilo para que puedas rotarlas.